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Lima, Perú (Spacio Libre).- La Comisión Ecuménica de Derechos Humanos (COMISEDH), hizo un llamado al gobierno y al Estado peruano en general,brindar una debida atención a los casos pendientes de violencia sexual contra las mujeres en el conflicto armado interno entre los años 1980 al 2000.

Según la nota de prensa, la película peruana “La Teta Asustada” que ha ganado dos premios en el Festival de Cine de Berlín, trata sobre una realidad invisible y pendiente en nuestro país: la violencia sexual contra la mujer durante el conflicto armado interno.

Los testimonios reportados a la CVR, dan cuenta de que la mayor parte de las víctimas de violencia sexual fueron mujeres, jóvenes, quechua hablantes, analfabetas, pobres, que vivían en zonas rurales.

COMISEDH también recuerda que los actos de violencia sexual se dieron durante las incursiones armadas. En el caso de Sendero Luminoso, las principales formas de violencia sexual fueron la violación, las uniones forzadas, la servidumbre sexual y los abortos forzados.

En cuanto a los agentes del Estado, la violencia sexual contra mujeres fue una práctica generalizada perpetrada en el contexto de masacres y ejecuciones arbitrarias, de operativos militares o policiales en medios rurales, andinos y amazónicos.

Esta película pone en el debate público un tema pendiente: la atención en cuanto a justicia y reparación a las víctimas de violencia sexual y a los hijos e hijas producto de dichos actos. En tal sentido, COMISEDH señala que «se ha mantenido vigilante del proceso de registro y reparaciones a las víctimas, especialmente, aportando con propuestas sobre la metodología adecuada para registro y las medidas de reparación que merecen, dadas las particulares secuelas que padecen, sobre todo, a nivel de salud mental».

De igual manera, COMISEDH patrocina varios casos de violación sexual ante las instancias judiciales, y ejecuta diversas acciones de incidencia para superar diversas trabas encontradas, como por ejemplo: un marco jurídico inadecuado que no contempla la figura de violencia sexual como delito de lesa humanidad; se les requiere exámenes médicos legales cuando los hechos ocurrieron hace muchos años atrás; no se valoran las pruebas psicológicas; las instancias estatales vinculadas a los agresores se niegan a entregar información.

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Por Spacio Libre

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