Periodista por convicción, sin otros valores que la veracidad y la valentía al momento de ejercer este oficio. Dudo desde el aire que respiro hasta el piso sobre el que estoy parado, pero -tercamente- creo que el mal periodismo de este país puede cambiar por obra y gracia de las nuevas generaciones. En realidad, una noche salí de mi tierra diciéndole a mi madre "me voy a cambiar el mundo, ya vuelvo".