Por: Luis Pacheco Quispe.
@Pacheco_Quispe
Existen preguntas sin respuestas cuando te das cuenta lo que sucede en la Municipalidad de Lima. A ver, ordenémonos. Los murales que fueron borrados toda la semana pasada en distintos lugares del Centro, revelan dos cosas alarmantes: la situación psicológica de nuestro alcalde y la clara prueba del rechazo por las expresiones culturales.
Moliere, dramaturgo francés, decía: “Los envidiosos morirán, pero la envidia es inmortal”. O sea, así podría ser recordado el señor Castañeda. Además, decía Epicteto, filósofo y pintor griego: “Solo el hombre culto es libre”.
Entonces, ¿En qué “prisión” se encuentra nuestro burgomaestre?
Ahora, la ultimita de la muni es el cambio del proyecto “Río Verde” por la construcción de tres by-pass para el tránsito de vehículos en las avenidas Arequipa, Arenales y Garcilaso de la Vega. Obra que, según Susana Villarán, salió de la noche a la mañana.
Y no es para menos la preocupación, la empresa brasileña OAS ya empezó la obra en la avenida 28 de julio. Obra que, según Julio Castiglioni, experto en temas municipales, no cuenta con el informe de presupuesto. “En la administración pública, si paso el dinero de una obra a otra, debe existir una modificación presupuestal y si no la hay, estamos hablando de malversación de fondos y abuso de autoridad”, añadió.
En medio de todo este problema se encuentra el destino de 256 familias shipibas cuya reubicación estaba a cargo de la empresa brasileña. Estarían en Campoy, en un complejo multifamiliar, según el acuerdo. Ahora, ¿Quién podrá defenderlos? Sobre este problema, el gerente de Promoción de la Inversión Privada de la Municipalidad de Lima,
Jaime Villafuerte, se refirió: “Hemos actualizado el plan con proyectos que generen impacto y que beneficien al colectivo, no a un grupo minoritario (los shipibos pues) que vive en un relleno sanitario”. O sea, las minorías no importan. Qué impactante.
Toda la información sobre el proyecto “Río Verde”, que se encontraba en la alameda Chabuca Granda, fue sacada el 27 de febrero pasado. Ahí se podía leer el contenido del proyecto, cositas como: 25 hectáreas de áreas verdes y circuitos recreacionales, piscinas públicas descontaminadas en toda la ribera, cuatro puentes peatonales que conectarían Lima, San Juan de Lurigancho y San Martín de Porres. Además, un malecón a lo largo del río desde Puente Piedra hasta Barrios Altos. Eso era el proyecto.
Faltaba lo más insignificante, casi unos 75 millones de dólares que fue la Concesión de Vía Parque Rímac, ¿Qué harán con todo ese dinero? Porque la denominada “Nueva Alameda” contará con 265 metros de áreas verdes en sus dos carriles. Y ese es el nuevo proyecto en ejecución. Parece que les importa más las carreras de coaster que veremos si se concluye esa obra (esa historia continuará mientras esté Luchito a cargo), que las áreas verdes. Es casi una verdad.
Para concluir, la ex alcaldesa de Lima manifestó, a través de su cuenta de Facebook, lo siguiente: “Todos queremos obras, muchas obras de infraestructura, obras sociales, culturales. Lima las necesita. Pero: ¿Con qué presupuesto se construye esta obra?, ¿Dónde está la autorización del Ministerio de Economía y Finanzas?, ¿Dónde está el expediente técnico, el estudio de impacto social, impacto vial?, ¿Dónde está la consulta a la Comunidad Shipibo-Coniba de Lima?, ¿Dónde está el Ministerio de Cultura por tratarse de una zona patrimonial?
Estas preguntas quedarán sin respuestas ya que nuestro alcalde, fiel a su “chapa”, seguirá mudo sobre el tema.
[…] Es a partir de esa supuesta conexión que usan el pretexto para redirigir los fondos del fideicomiso del proyecto Río Verde (del megaproyecto Vía Parque Rímac) para financiar la construcción de este mamotreto. Para más detalles de cómo se justificó la anulación de Río Verde para este bypass, pueden ver esta nota que hicimos en su momento. […]
[…] dentro de lo que se conoció como Vía Parque Rímac y que beneficiaría a los habitantes de la Comunidad Shipiba de Cantagallo y a la ciudad en general con la recuperación del río Rímac y sus […]