Siempre en marcha y en olor a multitud. Diez Canseco llegaba hasta la Plaza Bolívar / Foto: Vilma Huertas (Spacio Libre)
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Gran número de personas llegaron a la Plaza Dos de Mayo a despedir al fallecido congresista / Foto: Vilma Huertas (Spacio Libre)
Gran número de personas llegaron a la Plaza Dos de Mayo a despedir al fallecido congresista / Foto: Vilma Huertas [Spacio Libre]
Por: Javier Contreras/ @Javiperiodismo

La política está de luto, porque ha fallecido uno de sus más connotados representantes de las últimas décadas, Javier Diez Canseco Cisneros, su vida fue su ideal. Se hizo gente de pueblo para servir a los más pobres y desfavorecidos, y fueron precisamente ellos, por quienes luchó durante 25 años de enérgica labor parlamentaria, quienes abarrotaron la Casona de San Marcos y le dieron, hoy, el último adiós.

Desde muy temprano, los exteriores del recinto universitario se colmaron de simpatizantes y amigos, que querían despedirse del líder, luchador, socialista demócrata, defensor de los derechos humanos, y aunque su familia decidió que la misa de cuerpo presente fuera en estricto privado, todos aguardaron que pasada las 9:30 el ataúd con los restos mortales saliera del velatorio para dirigirse a la Plaza Bolívar y acompañaron a Diez Canseco, como su trayectoria lo amerita, en olor a multitud.

Féretro de Javier Diez Canseco saliendo de la casona de San Marcos / Foto: Javier Contreras - Spacio Libre
Féretro de Javier Diez Canseco saliendo de la casona de San Marcos / Foto: Javier Contreras [Spacio Libre]
El camino por la Avenida Abancay es digno de recordarse, las banderas de los partidos de izquierda, de los socialistas, de la Confederación General de Trabajadores del Perú (CGTP), los vítores y cánticos «¡Javier, Dignidad! ¡Cuando un socialista muere, nunca muere! ¡Siempre de pie, nunca de rodillas!» acompañaron una manifestación encabezada por 3 personas con discapacidad, que representaban a aquellos con los que Javier siempre se sintió identificado y por quienes luchó hasta el fin de sus días.

En la Plaza Bolívar, abarrotada, los congresistas afines (no el grupúsculo que promovió su sanción infundamentada) lo despidieron resaltando sus atributos exhibidos a lo largo de sus 7 periodos congresales. Heriberto Benítez aseguró que «Javier Diez Canseco, supo levantar la bandera de la honestidad, a veces solo», en tanto Carmen Omonte lo halagó porque «supo trascender por una vida de heroicidad», a su turno la parlamentaria Gloria Coari se refirió a Diez Canseco como un hombre «Honesto, consecuente, luchador, y que sembró líderes y cuadros políticos».

A su turno, la legisladora Verónica Mendoza lo definió como «El Parlamentario» y finalmente, Víctor Andrés García Belaúnde aseguró que «Javier no pertenece a este parlamento venido a menos, él está junto a los más grandes» .

Restos de Javier Diez Canseco llegan a la Plaza Bolívar / Foto: Javier Contreras (Spacio Libre)
Restos de Javier Diez Canseco llegan a la Plaza Bolívar / Foto: Javier Contreras [Spacio Libre]
Los asistentes durante todo el homenaje en la Plaza Bolívar no dejaron de gritar, y lanzar gritos de protesta contra el presidente del Congreso Víctor Isla, a quien calificaban de «traidor», «inmoral» y demás agresiones por la sanción que aún se resisten a levantar contra Diez Canseco. Cabe resaltar el gran abucheo que recibió el parlamentario Javier Bedoya, del PPC, cuando intentó tomar la palabra, el rechazo fue generalizado.

Pasado el mediodía, y finalizado el homenaje en el Congreso, la caravana se dirigió a la Plaza 2 de Mayo donde la CGTP le rindió homenaje, los representantes de diversas organizaciones de izquierda, que estuvieron en el lugar  juraron delante del ataúd de uno de sus líderes más importantes luchar por mejores condiciones laborales, la igualdad de los derechos de los trabajadores y la justicia social. Todos juntos entonaron LA INTERNACIONAL, himno mundial del comunismo.

Siempre en marcha y en olor a multitud. Diez Canseco llegaba hasta la Plaza Bolívar / Foto: Vilma Huertas (Spacio Libre)
Siempre en marcha y en olor a multitud. Diez Canseco llegaba hasta la Plaza Bolívar / Foto: Vilma Huertas [Spacio Libre]
Luego, atravesando toda la avenida Alfonso Ugarte, donde recibió muestras de aprecio por parte de los médicos del hospital Loayza que salieron a recibirlo e hicieron sonar las sirenas de sus ambulancias el féretro llegó a la sede central del Partido Socialista Peruano, en la Plaza Bolognesi, donde sus copartidarios le despidieron con los honores que tamaña personalidad amerita.

Tras este recorrido por importantes lugares, finalizaron los homenajes y el cuerpo fue llevado a un cementerio local, para su respectiva cremación, para luego . Ha muerto un luchador, un político de la vieja escuela, dejó un testimonio vívido de amor por el país, por los más pobres y necesitados, ha muerto Javier Diez Canseco, adalid de la democracia y su legado vivirá por siempre en el corazón de quienes (aunque lejos de sus ideas) apreciamos su fidelidad por ellas.

Gente de diversos lugares llegó a rendir homenaje a Diez Canseco / Foto: VIlma Huertas (Spacio Libre)
Gente de diversos lugares llegó a rendir homenaje a Diez Canseco / Foto: VIlma Huertas [Spacio Libre]

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Un comentario sobre «CRÓNICA. El legado del Parlamentario bueno»

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