- Después de tres décadas, familiares de 65 victimados en la región de Ayacucho, durante la época de conflicto armado interno, recibieron de manos de funcionarios del Ministerio Pùblico los restos óseos de sus hasta entonces desaparecidos.
Redacción Spacio Libre / @spaciolibre
Los restos fueron recuperados de fosas clandestinas y entregados a los familiares en la ciudad de Huamanga en ataúdes de madera. Las víctimas eran hombres, mujeres y niños asesinados entre 1984 y 1991, según informó La República.
Uno de los familiares, la señora Angélica Cusi Díaz, de 75 años de edad, quien sufrió la perdida de su esposo e hija a manos de la agrupación terrorista Sendero Luminoso, narra cómo fueron los hechos de terror en esa época. Años que tenemos la obligación de no olvidar.
“Mi hija Lucía Cuadros tenía 14 años cuando fue llevada a la fuerza por el senderista Mario Flores Zevallos y la hizo su pareja; en aquellos años mi esposo era teniente gobernador de Belén Chapi y los terroristas lo mataron, por ello mi Lucila intenta escapar de los terroristas pero fue capturada y asesinada por el mismo Mario Flores que aún sigue vivo”, cuenta entre sollozos la señora.
Los cuerpos entregados fueron exhumados el 2011 y 2013 de fosas comunes. La fiscalía de Ayacucho concluyó, en base a los testimonios recogidos de los sobrevivientes, que estos asesinatos fueron cometidos por policías, militares y miembros de Sendero Luminoso.