
Lima, Perú (Spacio Libre).- El magistrado electo del Tribunal Constitucional, Rolando Sousa manifestó que no está interesado en quedarse en ese cargo, es decir, que no existen las condiciones necesarias para que asuma la función, sin embargo, al no poder renunciar, aceptará lo que decida el Congreso.
Por ello, Sousa expresó: “Me siento muy maltratado y a pesar de que he tenido la intención de trabajar por el país y aceptar esta invitación, no se dan las condiciones (para asumir el cargo)”, además acotó que es blanco de calumnias por parte de organizaciones de Derechos Humanos, que plantearon una tacha en contra de su elección.
En ese sentido, dijo que no puede ser tachado por el libre ejercicio de profesión y recordó que él, a diferencia de sus representandos, no ha sido acusado por violación a los derechos humanos.
Asimismo, lamentó que los otros magistrados electos a ese organismo del nacionalismo Francisco Eguiguren y Víctor Mayorga no hablen claro si van a dar un paso al costado o no.
“Estoy seguro que no está planteando su renuncia, porque su comunicado lleva una frase equivocada que lleva a varias interpretaciones. Ellos (los candidatos del nacionalismo) sí se quieren quedar, a mí no me interesa y estoy a disposición de lo que finalmente decida el Congreso”, declaró a Radio Programas desde Israel.
El ex legislador es socio del abogado César Nakazaki, cuyo estudio no solamente representa al ex presidente Alberto Fujimori, sino a militares implicados en delitos de lesa humanidad.
Por último, el fujimorista manifestó poseer “credenciales éticas y morales intachables”.
Por: Esthefany Chacaltana / @EsthefanyCN