
El general Carlos Alberto Paz Figueroa, jefe del Comando de Reservas y Movilizaciones del Ejército peruano, fue condenado a 15 años de prisión por la desaparición del profesor Rubén Villanueva Toro, en Huancavelica, el 25 de marzo de 1990. Así mismo fue condenado con la misma pena de cárcel el teniente coronel EP Yorvil Távara Olea, sumado a ello el pago de 100 mil soles de reparación civil.
Este caso fue desarrollado por los jueces Marco Cerna Bazan y María Vidal la Rosa Sánchez quienes argumentan que los militares Paz Figueroa y Távara Olea son responsables de la desaparición de Villanueva Toro, detenido por un grupo de militares por no portar su libreta electoral, durante una ceremonia de izamiento del pabellón nacional.
Entre los testigos está el hermano de la víctima, Diosdado Villanueva, que fue detenido y torturado cuando se acercó a la base militar llevando la libreta electoral de su hermano Rubén; Diosdado fue liberado a las 6:00 de la mañana, del 26 de marzo, y llevado a un posta médica para que lo atendieran de los golpes que había recibido.
Paz Figueroa y Yorvil Távara Olea afrontaron este proceso judicial con comparecencia y ayer se presentaron a la lectura de sentencia. Tras leerse el veredicto ambos quedaron detenidos y pasaron a la carceleta.
Con información de La República
Por: Harlyn Flores

Como es posible que alguien que defendiò la democracia, poniendo en juego su vida y la tranquilidad de su hogar, termine preso por la falta de criterio de jueces, que ahora gracias a la paz lograda por el Ejèrcito, pueden mostrar el rostro para juzgar a quienes se jugaron el pellejo, repito, por defender la democracia.
El Gral Paz es un caballero, buen padre de familia, amigo y excelente jefe, no merece este trato tan humillante. Acompaño a su digna familia en este momento tan dificil, y se que la justica pronto llegarà.
Hago extensivo este mensaje para elComanadante Tàvara, otro buen Oficial.
Es indignante como los jueces no se dan cuenta la injusticia que han cometido con estos dos grandes señores miembros del ejercito que día a día dan su vida por mantener la seguridad de nuestro país, bueno acompaño a su familia en estos momentos difíciles y espero que esa condena se pueda anular porque eso no es justicia.
no respetaron los derechos humanos, los militares son deshumanizados y actúan en calidad de animal irracional por ende deberían aplicarse el mismo criterio en casos similares para se respete la vida en el Perú! por favor publiquen la sentencia