Bernales destacó la participación de Vargas Llosa y del presidente García por aportar la solución que hará posible que el Perú cuente con tal museo, cuyo proyecto fue cuestionado en un primer momento por miembros del Gobierno como el ministro de Defensa Ántero Flores-Aráoz.
En la reunión privada que sostuvieron el jefe del Estado y el escritor, se dispuso que este sea quien proponga los nombres de tres o cuatro personalidades que se harían cargo del proyecto.
El padre Garatea sugirió que el museo no sea excluyente y represente a todos los peruanos. En ese sentido, dijo que lo ideal sería que los organizadores del recinto sean personas independientes y alejadas de la actividad política.
En las filas del partido aprista también se escucharon voces que saludaron la decisión presidencial. El legislador Jorge del Castillo se animó a proponer que sea el mismo Vargas Llosa quien dirija el patronato encargado de la realización de la obra.