
Barcelona, España (Spaciolibre).- En su visita al Camp Nou, Bayern München le ganó 3 a 0 al Barcelona logrando la clasificación a la tan ansiada final de la Uefa Champions League.
Barcelona salió a hacer su juego, a tocar y a buscar la hazaña, todo el primer tiempo se la pasó atacando el arco del cuadro alemán, teniendo como conductor a Andrés Iniesta. Pero esta desesperación del cuadro catalán no afectó el orden defensivo del Bayern, por el contrario le otorgó espacio por donde atacar.
No hay primera sin segunda
En el segundo tiempo, aquella desesperación del Barcelona que conllevó a dejar espacios en el campo fue aprovechado por el cuadro alemán y a los 48 minutos con un fuerte zurdazo de Arjen Robben venció por primera vez la valla de Valdés.
Después de aquél soberbio gol, el Barcelona se fue con todo al ataque hasta que al minuto 73 tras un centro de Ribéry conllevó a que Gerard Piqué en su intento por rechazar el balón lo metiera en su propio arco decretando el 2 a 0. Desde ese gol el Barcelona se mostró sin ideas, sin orientación. A los 77 minutos la figura del encuentro, Ribéry vuelve a centrar y Müller la manda a guardar sellando la clasificación del cuadro Bávaro.

Y faltó Messi…
Sin lugar a dudas, hoy el cuadro español necesitó un generador, un conductor de juego, responsabilidad que en primera instancia cayó sobre Andrés Iniesta pero no bastó.
Lionel Messi se quedó en el banco de suplentes tras no superar la lesión que lo aquejaba, y eso afectó mucho al “Barça”, que careció de fútbol, de ideas y de un “10” que pusiera la pelota precisa a los delanteros o supiera anotar como lo hace Lionel.
Por: Diego Vertiz / @DiegoVertizM
