SIN TAPUJOS. ¿Qué pasaría si fuéramos más tolerantes?
Foto: Internet

SIN TAPUJOS. ¿Qué pasaría si fuéramos más tolerantes?

Compartir
Foto: Internet

Por: Jack Hurtado

Hace unos días una amiga me hizo la pregunta de qué pasaría si el peruano se volviera más tolerante, y juntos, empezamos a deslizar una serie de respuestas elucubradas en este hipotético caso. “Habrá esperanza de ser un país más desarrollado”, “ocurrirìa la verdadera y única Gran Transformación” fueron algunas de las respuestas más esperanzadoras. Utopía total.

El peruano -y vamos, no nos satanicemos- también otros países vecinos son intolerantes. No pueden permitir que nadie piense distinto, más aún cuando son solo opiniones y no tienen por qué ser verdaderamente ciertas. Pero, ¿a qué viene el tema de la columna?

Todo surgió a raíz de las declaraciones del escritor Iván Thays. No voy a hablar de él porque simplemente ya fue escudriñado hasta el hartazgo. Cuando reveló que no le gustaba la comida peruana. ¡Boom! Estalló la bomba, los mensajes en las redes sociales no tuvieron cuando acabar, la dichosa polarización volvió a reinar. ¿Por qué tanto alboroto? Si no le gusta la comida peruana y a ti sí, ¡Déjalo! Es asunto suyo, ¿por qué te jalas los cabellos y las vestiduras? Es su vida, es su estómago, es su paladar.

Mi única discrepancia con Mr. Thays es por cuestionar que nuestra gastronomía es “indigesta y poco saludable” sin ser él un erudito en la materia como para comentar con criterio amplio. Sin embargo, estas declaraciones y “presunta publicidad gratuita” sirvieron para desnudar una vez más. -Sí, una vez más- la intolerancia que gobierna en muchos de nuestros compatriotas.

Hay gente que no le agrada el cebiche y no puede decirlo; otras que no beben, son abstemios pero en reuniones tienen que “hacer la finta” porque sus compañeros no le permiten ser diferente; otras tienen gustos por el mismo género y no se lo cuentan a nadie, se lo guardan; muchos odian su carrera y estudian por gusto de sus padres, pero no se lo recriminan, otros son de un determinado equipo de fútbol y amedrentan, insultan y hasta matan al hincha rival; otros votan por “x” candidato y son criticados por los votantes del otro postulante, son llamados ignorantes. Lamentablemente NO existe tolerancia en nuestro país, no existe.

¿Por qué no respetar lo que piense el otro? ¿Por qué no compartir conocimientos y puntos de vista sobre un determinado tema en lugar de apuntar con el dedo y marginar? ¿Por qué no convivir en armonía con todos sin temor al qué dirán, sin temor a expresarnos y/o sentirnos intolerados?

“Mayor crecimiento no equivale a mayor desarrollo, habrá más plata pero seguimos igual de brutos”, aseguró Jaime Bedoya en una columna, y es que si no empezamos a respetarnos, tolerarnos, no llegaremos a un buen fin; surgiremos y tendremos éxito en muchas cosas, pero en el fondo del asunto, en lo que verdaderamente importa seguiremos igual de vacíos. No hace ningún daño que la otra persona piense distinto a ti, eso no te mata. La intolerancia que luego se transforman en discriminación y en muy poquito tiempo en violencia, eso, eso sí puede matar. Nos leemos más tarde.

Sobre el autor

2 comentarios

  1. No confundir tolerancia con indolencia. Debemos discrepar cuando una opinion o una vision del mundo no nos parece correcta. Discrepar no es Intolerancia. Debemos evitar el otro extremo. Lo que sucede en el Peru que cuando una opinion no concuerda con la nuestra, no debatimos ni sustentamos nuestra oposicion, no cuestionamos la idea que no conpartimos, sino que atacamos a la persona que la emitio, la insultamos, la estigmatizamos, la ridiculizamos, la caricaturizamos. Tolerancia no es ni aceptacion ni promocion del otro. Es Tolerancia. Y esa fuerte tendencia intolerante que encontramos en el Peru, claro que si, no es exclusividad nuestra, sino que transversalmente la encontramos en todo el planeta. Queda simplemente senalar cada vez que podamos para todos juntos mejorar nuestros estandares de tolerancia. Saludos cordiales

  2. Excelente articulo de mi querido amigo Jack Hurtado, y queria mencionar que teniendo en cuenta la experiencia que estoy viviendo en este pais,me he dado cuenta que el pilar del «bienestar social» que existe en Estados Unidos (no siempre y no en todas partes, pero de hecho mucho mejor que en el Peru) se resume en dos palabras que el peruano aun no ha podido comprender en su totalidad: Libertad e Igualdad. Yo creo que el sistema de educacion deberia inculcar mas estos valores en nuestros niños y jovenes peruanos, solo asi podremos lograr que se tolere y respete el punto de vista diferente del projimo, sin dejar de argumentar una propia opinion. Sin embargo, con mucha pena hay que decir que el Peru tenemos una traba para el objetivo comun: el racismo. Maldito enemigo, aun no podemos comprender que cualquier persona, sea moreno,mestizo, gringo, andino, negro; de provincia o de la capital; pobre o rico; con una buena instruccion en un tema, es capaz de dar una opinion que debe tomarse en cuenta y debatirse, con el debido respeto.
    Ojala este articulo pueda llegar a los ojos de muchos peruanos, que lo lean, lo entiendan y lo asimilen, que ya estamos hartos de una sociedad tan injusta, racista e intolerante; y que sea el primer paso al cambio. De nuevo, felicidades por el articulo.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *