Los más adictos a esta nueva forma de comunicación son la pareja de actores formada por Demi Moore y Ashton Kutcher, que utilizan su espacio personal para comunicarse con sus fans, opinar sobre temas y presumir de la relación perfecta que hay entre ellos.
Pero a veces abusar de la red puede causar más de un disgusto. Y si no que se lo digan a Kutcher, al que se le ocurrió colgar una foto que hizo al trasero de Moore. La instantánea, tomada en vísperas de la boda de Bruce Willis, exesposo de la actriz, iba acompañada de una explicación del actor: «Veo mi mujer planchando mi traje con un biquini. Gracias, Dios». Moore, enfadada, le replicó con un tweet (nota del portal), de lo más fría: «La próxima vez quemo tu chaqueta», aunque la pareja acabó reconciliándose después de que el joven marido de Moore le pidiera disculpas solicitando a sus seguidores que mandaran mensajes a la dirección de Demi, que recibió 3.600.
Afición Peligrosa
El pasado jueves Kutcher volvió a demostrar su afición a Twitter al retar al canal estadounidense CNN para ver quién de los dos conseguiría primero el millón de amigos en 24 horas. La cantante Britney Spears, otra aficionada a los tweets, se apuntó a la carrera. Kutcher ganó la competición. El intérprete dedicó la victoria a su millón de contactos.
Otro fanático de este portal es el cantante John Mayer, conocido por su relación con Jennifer Aniston. Su afición por este microblog fue el motivo de su reciente ruptura con la actriz ya que, según Usa Today, «Mayer pasaba más tiempo en Twitter que con ella». Y como no podía ser de otra manera, el músico anunció su separación de la ex de Brad Pitt vía tweet.
El ciclista Lance Armstrong también utiliza esta comunidad virtual para relatar los detalles de su vuelta a la competición a los más de 600.000 contactos que tiene. Los cantantes Robin Williams y Mariah Carey, la modelo Heidi Klum, el jugador de la NBA Shaquille O’Neal y la actriz española Elsa Pataky son otros de los famosos que poseen una cuenta en Twitter.
Sin embargo, no todo son halagos y felicitaciones para la red. La actriz británica Keira Knightley declaró hace unas semanas: «Odio Twitter porque es deshumanizante». La protagonista de Piratas del Caribe sentenció: «Los personajes públicos siempre hemos luchado contra los paparazis para conservar nuestra vida privada y ahora hay quienes hacen más daño que ellos». Visto así, es el mundo al revés.
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