
Frente al Hotel Sheraton se dio una protesta protagonizada por médicos y organizaciones de la sociedad civil, como Forosalud, contra la propuesta del Ministerio de Salud (Minsa), que pretende poner la administración de la salud pública en manos de capitales privados, lo cual significaría reforzar una asociación público-privada.
La ministra de Salud, Midori de Habich, estaba en una reunión internacional con “expertos” en salud pública justo en el lugar de la protesta, en donde haría el anuncio del Plan de Reforma del Sistema de Salud. De Habich convocó a un foro para ver este proyecto, sin embargo, no se consultó con las asociaciones médicas, de pacientes, ni gremios, lo cual torna arbitrarias las acciones de la titular de Salud, y da la impresión de que se está negociando esto “bajo la mesa”.
A todo esto, se tiene que añadir el hecho de que existen malos precedentes de dejar en sectores privados la salud pública, tal como el caso de Colombia, Chile o España. En Colombia, por ejemplo, luego de 10 años de experimentar con esta reforma, el Congreso colombiano tuvo que retroceder, pues el modelo no había resultado como se esperaba, además de que hospitales colombianos importantes habían cerrado, y a pesar del mayor presupuesto que se tenía, no había un control adecuado por lo que la mortalidad infantil subió. Por esta razón, Jesús Bonilla, presidente de la Asociación Nacional de Médicos del Ministerio de Salud, calificó de irresponsable a la implementación de esta reforma en el Perú. Así también, se estaría yendo contra la propuesta de campaña de Ollanta Humala, donde prometía universalizar la salud, algo contrario a lo que resultaría de la reforma del Minsa.

¿Y los medios de comunicación?
Por otro lado, resultó irónico que el medio de prensa televisiva del Estado, TVPerú, llegara al lugar de los hechos sin ver la otra cara de la moneda (la protesta y posiciones en contra de la reforma del Minsa) y solo entrara a cubrir la posición del sector Salud.
Por esta situación, y bajo la consigna “La salud es de todos”, se convocó a una Asamblea Nacional de delegados el sábado 8 de junio, y se suma a aquello, una iniciativa de reiniciar la huelga indefinida en julio de este año si la situación continúa siendo la misma.
