
Los restos del parlamentario serán velados este martes 8 en la Iglesia Vírgen de Fátima, del distrito limeño de Miraflores, según informó el Congreso de la República.
El día miércoles 09, el Partido Nacionalista, le rendirá un homenaje en su local central.
El legislador tacneño, sufría desde hace varios meses un problema cardiovascular que melló su salud de manera visible, tal como se vio en el mes de junio cuando el congresista sufrió una crisis de laberintitis luego de una manifestación de su bancada.
Precisamente Ordóñez, se desempeñaba como presidente de la comisión especial de seguimiento de la demanda peruana ante la Corte Internacional de la Haya por el diferendo limítrofe marítimo con Chile.
Por ese cargo, puso especial énfasis en sus declaraciones, respecto a la demanda peruana, más aun al conocerse el caso de espionaje del sub oficial peruano Víctor Ariza, en favor de Chile.
Ordòñez Salazar, nació el 16 de mayo de 1948 en el distrito de Ilabaya, provincia de Jorge Basadre, del departamento de Tacna. Por más de 27 años se desempeñó como docente, lo que lo llevó a ser dirigente sindical del SUTEP en Tacna.
Su permanencia en la dirigencia sindical, lo llevó a participar en los paros nacionales de la década del 70 que lucharon contra la dictadura militar de esa época.
Por ello fue arrestado y encarcelado junto a toda la dirigencia nacional del SUTEP en el peligroso y selvático penal de “El Sepa”.
Desde 1985 hasta 1995 estuvo ligado al diario “La República”, desempeñándose primero como corresponsal en Tacna, cargo en el que resaltó su cobertura de hechos políticos relacionados a la relación que mantiene nuestro país con Chile.
Fue también Editor Regional de este medio de prensa en la filial tacneña tras un proceso de descentralización iniciado en la década pasada, cargo que se vio obligado a dejar debido a la intensidad que cobró su actividad política, toda vez que como militante de la Izquierda Unida asumió el cargo de regidor de la Municipalidad Provincial de Tacna desde 1988 hasta 1991 y fue postulado luego a la Alcaldía Distriral de Ilabaya (su tierra natal) en la que ejerció la máxima autoridad de 1999 al 2002.
Sus colegas parlamentarios se han encargado de destacar con justicia el trabajo, la dedicación, la entrega de Juvenal Ordóñez Salazar como congresista de la República. A mi me gustaría destacar el papel que le correspondió hacer cuando trabajó en la Dirección Regional de Educación de Tacna (2005). Como pocos, llegó con ideas nuevas y proyectos innovadores. Entre estos cabe destacar «La Hora de la Lectura» el mismo que llegó a implementarse con éxito en todas las II.EE. de la región. Desde los estudiantes hasta los porteros teníamos una hora para la lectura y comentar en grupos lo que leíamos… El otro fue «Reforzando Aprendizajes» proyecto que llegó a funcionar en los clubes de madres, vasos de leche, juntas vecinales, etc. Fue un Maestro a carta cabal que predicó con el ejemplo y encarnó lo que a todo Educador debe caracterizar: creación, compromiso y lucha por una educación mejor para todos los peruanos. Adiós Profe. Su ausencia se dejará sentir en Tacna y en el Perú. Y «cuando un Maestro muere, nunca muere».