EDITORIAL. Villarán y el efecto Prado
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EDITORIAL. Villarán y el efecto Prado

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*** EDITORIAL *** / @spaciolibre

Dar un paso al costado resulta siendo -muchas veces- un remedio tardío, aunque a veces necesario. Errores seguidos que dejan la duda de una ingenuidad novata o de una viveza (mal llamada) criolla pueden generar más de una torcida de boca entre los partidarios y seguidores de una causa.

Esta semana la gestión de la alcaldesa de Lima, Susana Villarán, tuvo que enfrentar un (nuevo) momento crítico, en esta ocasión la lideresa de Fuerza Social ha tenido que dejar de lado su reconocida adhesión a sus asesores y compañeros de partido para responder a lo que podía ser una ola masiva de críticas y rechazos, nada gratos a menos de un mes para la revocatoria.

La alcaldesa Villarán tuvo que aceptar, imaginamos que con mucha desazón de su parte, la renuncia de Gabriel Prado, hasta el cierre de este texto presidente del directorio de EMAPE y ex gerente de Seguridad Ciudadana de la comuna limeña. Una denuncia periodística lo ponía como responsable del «abandono» de un centenar de vehículos consignados para el Serenazgo capitalino, sin embargo el hecho real era que los vehículos no estaban listos para circular y fueron presentados a la prensa con circulinas alquiladas y sin placas de rodaje y lo que es peor todo este material fue presentado en conferencia de prensa por la misma alcaldesa.

Delito contra la fe pública o error administrativo, es sólo un hecho que podrá ser determinado por las instancias correspondientes. Lo cierto es que el mensaje a la alcaldesa fue claro y contundente, una persona como Gabriel Prado cuestionado por una serie de errores, debió haber sido removido del cargo, o de las cercanías del despacho municipal desde hace mucho, sin embargo no se hizo, tal vez por una (respetable) actitud de la alcaldesa de no dejarse llevar la agenda por los medios de comunicación y una oposición (que en algunos casos busca cabezas que mostrar). Pero ahora, el panorama es distinto…

Es viable que Prado, amigo personal de la alcaldesa de Lima haya sido aconsejado a dar un paso al costado, su imagen en estos momentos estaba costando un par de puntos en las encuestas y es probable que la señora Villarán, también lo haya entendido y hayan aceptado (presumimos) haber dado este paso este juntos en beneficio de un objetivo mayor (la revocatoria, la imagen municipal, las encuestas).

A estas alturas del partido, y como lo dijimos antes tanto la alcaldesa de Lima, como su concejo municipal y su cuerpo de asesores deben dar claras muestras de señales políticas, actitudes que le muestren a la población que no se casan con nadie, lo hicieron con la reforma del transporte, con los taxistas, con La Parada, con los regidores Valer y Tito, lo han hecho con Prado, deben hacerlo con quien sea protagonista de cualquier hecho doloso o donde siquiera quede una duda de irregularidad.

¿Eso es dejarse llevar la agenda? No. Simplemente es reaccionar rápido ante una crisis. Honestamente pensamos que se demorarían más para tomar acciones, lo hicieron en menos de 24 horas lo cual es un cambio considerable. A menos de un mes de decidirse su futuro, la gestión Villarán no puede darse el lujo de otro caso como el de Gabriel Prado… el equipo del No está trabajando duro y por las apariciones constantes, el equipo municipal también, no puede permitirse que un error administrativo se traiga abajo los cinco o seis puntos ganados y que la brecha de 10 a 20 puntos entre el «Sí» y el «No» se amplíe… depende sólo de ellos, ni siquiera de Favre, sólo de ellos.

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