Lima, Perú (CNR).- El líder del Movimiento Tierra y Libertad, Marco Arana, salió al frente de las críticas formuladas por el ex presidente de la Mesa de Concertación de Lucha contra la Pobreza, Gastón Garatea, quien dijo que debe definir si quiere ser político o sacerdote.
A través de CNR, Arana señaló que, si se oficializa su eventual candidatura a la Presidencia de la República, lo que procedería es gestionar el permiso correspondiente ante las autoridades de la Iglesia.
En ese sentido, recordó que los alcaldes de Quillo y de Independencia (Ancash), Luis Palomino Palacios y Gregorio Mezarina, respectivamente, son también religiosos que ejercer actividades políticas con el permiso del clero.
«El problema en mi caso es que se está haciendo mucho ruido; no porque sea sacerdote sino porque he desafiado a los grupos de poder. Entonces, entran todos los reflectores (…) hay un poco de morbo en la noticia también», comentó.
Arana indicó que, en todo caso, su participación en la carrera por el sillón presidencial se definirá en la asamblea nacional que celebrará Tierra y Libertad en abril del 2010.
Respecto a la propuesta política de su movimiento, Arana destacó que Tierra y Libertad nace como respuesta ante la crisis de los partidos políticos y la falta de confianza de la ciudadanía para con dichas agrupaciones.
De igual manera, consideró que el país ha retrocedido en cuanto a cultura democrática y se ha estancado en lo que respecta a lucha contra la pobreza. «Necesitamos un país que sea para todos y no como ahora que sólo beneficia a los pequeños grupos de poder y deja fuera a las grandes mayorías», enfatizó.
Además, el también fundador del GRUFIDES indicó que ningún partido ha demostrado real interés por los temas ambientales aun cuando éstos constituyen la principal causa de conflictos en el país.
Por lo anterior, opinó que son «irrelevantes» los comentarios de aquellos que pretenden encasillar a Tierra y Libertad dentro de alguna categoría política. «Nos consideramos un grupo de democracia radical, porque pretendemos que los derechos alcancen para todos; pero hacerlo en democracia, marcando distancia de la violencia y de visiones dogmáticas y fundamentalistas».
«Más que una etiqueta, de lo que se trata es de ver lo que proponemos al país y como lo queremos hacer (…) creemos que Tierra y Libertad es el espacio de encuentro de todas las personas que aman la tierra, que quieren la Pachamama y que quieren vivir en libertad. Y por ese motivo estamos por encima de esas definiciones ideológicas», concluyó.