Compartir

Pedro Del Rosario lleva 24 años liderando la Federación Peruana de Karate (FPK), casi el doble que el hoy extraditado Manuel Burga, el hombre que en algún momento fue el más poderoso e influyente de la escena deportiva del país.

«¿Otro como yo? Naahh!!»  Foto: Difusión

Por Marquiño Neyra
@AndyNeyraY

En Perú, hablar de deportes es un eufemismo para referirse solo al fútbol, pero la corrupción desconoce de términos. Desde crear ligas ‘fantasma’, escoger personal a dedo, hasta inhabilitar a otras listas para que se presente una lista única (como se verá en las próximas elecciones este sábado 14 de enero), ha llevado a Del Rosario a la cúspide del abuso del poder en sus más de dos décadas en la Federación Peruana de Karate.

Por ello, un grupo de deportistas exigen a las autoridades del Instituto Peruano del Deporte (IPD), al Ministerio de Educación y al Congreso de la República que realicen una auditoría y fiscalicen las elecciones en la FPK, cuya junta directiva está enquistada en la dirigencia desde hace 24 años.

Desde la creación de esta Federación, una larga sarta de irregularidades la ha perseguido. Según fuentes consultadas por Spacio Libre, revelan que desde antes de fundarse la Federación Peruana de Karate en el 2001, Pedro Del Rosario ya se mantenía en las altas esferas del Instituto Peruano de Deporte (IPD), durante el gobierno de Alberto Fujimori.

Pedro Del Rosario (en el medio) en  reunión de coordinación, para la realización del Campeonato Mundial de Karate, categoría Mayores a realizarse en nuestra capital en el año 2018. Foto: IPD

Aseguran que desde esa época los altos directivos de cada legación estaban allí por cargos de confianza. En el 2001, en la primera asamblea para asignar al presidente de la recién creada Federación Peruana de Karate, de las 20 ligas que votaron, 9 no estaban en los registros públicos. En las siguientes elecciones del 2005 no hubo elecciones porque días antes Del Rosario cambió algunas leyes para poder evadirlo.

Asimismo,  en las elecciones del 2009 realizó la misma artimaña con ligas que recién se habían inscrito en los registros públicos, pero muchas de estas figuraban con la misma dirección o hasta en el mismo domicilio de los dirigentes deportivos.

Lo mismo señaló Alfonso Lepage, miembro de la primera selección de Karate del Perú (1972), campeón bolivariano (1976) y poseedor de una vasta experiencia que va desde entrenador de la selección juvenil y de mayores de la Federación, hasta subdirector del tribunal de grados de la FPK. El ex entrenador nacional reveló a Spacio Libre que desde que Del Rosario entró al poder en 1992, ha visto una serie de irregularidades dentro de la Federación.

“La jugada para estas elecciones del sábado 14 es que la única plancha que ha sido asignada a dedo por Pedro Del Rosario, va a renunciar y luego él volverá a tomar el poder”, sentenció.

En Perú, las elecciones de la Federación Peruana de Karate se dan cada cuatro años, pero éstas siempre se realizan de forma sorpresiva. ”Ponen la fecha en cualquier momento para no dar tiempo a las ligas y clubes para que se formulen. Siempre ponen obstáculos, vallas cada vez más altas”, reveló Lepage.

Según la Ley del Deporte, la Federación solo puede invocar elecciones desde agosto hasta el 31 diciembre del año del proceso. Sin embargo, el comité directivo lo ha evadido. Además, señala Lepage, en esta oportunidad han colocado como requisito el estar cuatro años en la Federación, cuando los únicos que pertenecen a ésta son del séquito de Del Rosario.

Tras todo este escándalo,  solo se ha inscrito la lista de Luis Basualdo (Cusco), conformada por la liga de Tacna, Cusco, Cajamarca, Puno y Piura, simpatizantes del actual presidente de la Federación Peruana de Karate.

La pregunta del millón: ¿Quién ganará?

El comité electoral sacó una resolución (Nº 003-2017/C.E-FPK) a la cual tuvo acceso Spacio Libre, donde señalan que la lista liderada por Basualdo es (curiosamente) la única que ha cumplido con todos los requisitos, mientras que la lista presentada por José Cruzado García proponiendo como presidente a Roberto Reyna, queda inhabilitada por “no cumplir los requisitos establecidos por el artículo 8º del Reglamento de Elecciones, por lo que no es posible comprobar el tiempo que se han desempeñado los postulantes como presidente de sus ligas y el grado universitario que ostentan”.

Por su parte, Carlos Ghersi, practicante de karate desde 1978 y parte de la lista de deportistas que denuncia a Del Rosario, señala que esto nunca había pasado antes. ”Han inhabilitado a los demás por detalles totalmente subsanables y que en cualquier otro rubro ya se hubiera arreglado”, señaló.

A pesar que gane la lista del cusqueño Basualdo, agrega Ghersi, Del Rosario va seguir perteneciendo al comité técnico, para luego regresar en el siguiente periodo. “Otra alternativa es que al ganar Basualdo, todos renunciarían de modo que Del Rosario continuaría con su mandato”.

Sin embargo, el asignado como presidente de la lista alternativa sí tiene estudios terminados de psicología. Sin ser eso suficiente, Roberto Reyna también fue entrenador de Alexandra Grande, la joven que logró la medalla de oro en los Juegos Panamericanos de Toronto 2015 y  acreedora  del primer lugar en la Premier League 1 de Austria.

Ahora, Reyna pertenece a la lista de candidato a presidente de la Liga Deportiva Distrital de Karate de Chiclayo, la misma que ha sido inhabilitada por el comité electoral liderado por Del Río. Esta era la única lista que le hacía frente al grupo simpatizante de Del Rosario liderado por Luis Basualdo, que al parecer estaría en el podio desde el 2017 al 2020.

Al igual que en el fútbol es necesario mirar a las federaciones no comerciales, puesto que también existirían artimañas en todas las ramificaciones del globo deportivo.

Por otro lado, Del Rosario no sería el único personaje, además de Burga, que ha buscado eternizarse en una federación deportiva. Demetrio Mamani Luna estuvo 26 años como presidente de la Federación Peruana de Kung Fu, la cual dejó –en palabras del nuevo presidente Miguel Pastor– en crisis: sin un organigrama, sin deportistas empadronados, sin un calendario oficial y, además, realizaba campeonatos cuando quería. Alguien dijo alguna vez que quien no abusa del poder, no tiene autoridad. No cabe duda que la ‘autoridad’ sobra en los dirigentes deportivos en el Perú.

Sobre el autor

Por Marquiño Neyra

Estudiante de periodismo de la Universidad Jaime Bausate y Meza. Desencadenar y escudriñar para salvar a la sociedad. Literatura, política y rock para el ocio. Usual peatón del Centro de Lima. Amante de los chifles y adepto de los mostradores y taxis como confesionarios o simuladores de la sala del siquiatra. "La política no es una ciencia exacta".

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *